EL MALESTAR QUE INSISTE. Sala Off del Teatro Lara.
Autor y director: Eduardo Recabarren.
Intérpretes: Rodrigo Poisón, Laura Cepeda, Camino Texeira y Víctor Martínez.
DRAMA COTIDIANO.
Desilusiones que se niegan. Futuros que se han vestido de un presente irremediablemente gris. Obsesiones nacidas a partir de una insatisfacción que se ignoran sufriéndose. Causas y efectos que se confunden, se intercambian, se regalan, se alimentan…
Consecuencias que se respiran, transpiran, escupen, silencian, gritan y caminan silenciosas entre las paredes de una casa, entre las tripas de una familia desmembrada y fatalmente rota.
Este malestar que insiste puede ser interpretado de múltiples formas: Un amor enfermizo y dependiente de una hija, que es hermana, que después fue esposa y finalmente madre. Un amor dependiente de alguien que aleja de sí, indefectiblemente a todo el que quiere. Un malestar que extiende sus tentáculos a todos los miembros de esta familia.
La obra escrita por Eduardo Recabarren es muy sencilla, absolutamente sencilla. Todo está sobre la mesa. Una rústica mesa central que corona, une y separa el hogar familiar. Una mesa que soporta estoica, los gritos y desaires de un hijo hastiado, de una madre agobiante, de una hermana mentalmente inestable y finalmente, de un padre asombrado, descolocado que destapa una dificultad vital que quiso evitar, alejándose…
Quizá la huida de esa mujer sea su primer acto cuerdo. Su primera acción generosa para sus seres queridos. Con ella les da la libertad… No sé, si llega a tiempo de darse a sí misma la libertad… Tampoco sé si su hijo sabrá ser libre…
El ambiente de “El malestar que insiste” es pesado, angustioso, repleto de desilusión y ansiedad.
Los intérpretes lo acentúan con una labor actoral magnífica.
La sencillez de esta propuesta es su grandeza y la magnífica labor de sus creadores (Autor y director, intérpretes) es su máxima validez.
Un malestar vital común; una insistencia que lo hace insoportable… Y es que a veces sobrevivir es tan complicado… Sólo los héroes lo consiguen… Es éste un drama de héroes cotidianos, a pie de obra… Héroes, que luchan día a día por sumar una hoja de su calendario… Héroes que esperan un milagro. Tal vez nunca llegue, pero lo que cuenta es no desesperanzarse, aunque esa desazón nos gaste, nos derribe, nos corroa, nos rompa por dentro….